Existen varios tipos de piel, las cuales necesitan diferentes tipos de cuidados de higiene, ya sea por resequedad, piel grasa, entre otras.
Para la piel normal:
La piel normal es aquella que la secreción sudoral y sebácea se encuentran perfectamente equilibradas, la formación de la emulsión percutánea se produce con toda normalidad, y por consiguiente, la piel se halla bien protegida presentando mayor resistencia frente a los agente externos.
Realiza un tratamiento estético y de higiene, por las mañanas limpia con un tónico sin alcohol y leche, luego debes aplicar una crema hidratante acorde a tu pH, preferiblemente de piel seca.
Para la piel seca:
La piel grasa es una piel que presenta hipersecreción sebácea. Su aspecto es brillante, gruesa y áspera.
Limpia con un tónico astringente y leche en las mañanas, luego coloca una crema tonificante para regular la cantidad de sebo.
Para la piel mixta:
La piel mixta siempre tiene la secreción sebácea concentrada en el centro del rostro, pero en ocasiones existe una notable diferencia entre esta zona central grasa, y el resto de la cara, que puede estar deshidratada.
Para realizar un tratamiento de higiene, se debe iniciar por evitar sustancias demasiado emolientes, que son las responsables de relajar y ablandar las partes inflamadas o demasiado astringentes, que son las que producen sequedad y contrición.
Se aconseja limpiar la piel con leche y un tónico sin alcohol por las mañanas, después es recomendable aplicar crema tonificante para regular la secreción sebácea en la zona central.
En las noches debes limpiar la piel y colocar crema tonificante agregando gotas de suero hidratante anti-edad, para combatir la deshidratación.
Esperamos que estos consejos te hayan sido de mucha ayuda! 🙂